Bienvenidos a
Puerto Plata
Puerto Plata, donde comenzó el turismo en República Dominicana, sigue siendo uno de los destinos preferidos por los visitantes. Su espectacular y extenso paisaje combina mar, montañas, verdes valles, ríos y una cantidad de playas. Su suelo fértil da lugar a plantaciones de cacao y café, mientras que debajo de la tierra, yace el ámbar más claro del mundo.
El astuto explorador, Cristóbal Colón sabía que había mucho que descubrir en la costa Atlántica de la isla, donde eventualmente encontró yacimientos de oro, cuando la vio desde su barco en 1492. Atraído por las nubes brillando sobre la Loma Isabel de Torres que iluminaban la vasta costa azul, bautizó el área como “Puerto Plata”, y se estableció en La Isabela con una comunidad mixta de españoles y taínos, los primeros habitantes de la isla. Allí construyó la primera iglesia y su primer hogar en las Américas. Podrás seguir el sendero de Colón y recorrer estas ruinas arqueológicas que ahora forman parte de un parque nacional.
La abundancia natural de Puerto Plata continúa asombrando a aquellos que ponen sus ojos en “La Novia del Atlántico”, como la llaman los lugareños. El teleférico de Puerto Plata, el único en el Caribe, te llevará a la cima de la Loma Isabel de Torres con su hermoso jardín botánico, donde tendrás una vista panorámica de la costa Atlántica con sus más de 100 kilómetros de playa que adornan los múltiples pueblos costeros, comunidades agrícolas de interior repletas de ríos y cascadas, y hoteles de todas las formas y tamaños para todos los gustos. Además, Puerto Plata alberga vestigios coloniales, incluyendo la colección más grande del Caribe de casas victorianas del siglo XIX, los fósiles de ámbar más antiguos del mundo en el Museo del Ámbar, y una de las primeras fortalezas coloniales de la región, la Fortaleza San Felipe, que data de 1577.
De este a oeste a lo largo de la costa de Puerto Plata, los vientos alisios constantes, los distintos ríos, la vasta Cordillera Septentrional y el Océano Atlántico conspiran para crear un mundo de aventura al aire libre, incluyendo pueblos costeros famosos por sus deportes acuáticos. A menos de media hora de la ciudad, el pueblo de Sosúa, fundado por inmigrantes judíos que huyeron de la Alemania nazi, donde conviven expatriados y locales, cuenta con hermosas playas y diversos puntos de buceo. A unos kilómetros, Cabarete es un centro famoso a nivel mundial de kitesurf, surf y windsurf, y un escondite cosmopolita favorito para aquellos que huyen del invierno. Playa Dorada es el lugar ideal para los que quieren relajarse con estilo, con actividades a la orilla del mar cerca de la ciudad, desde barranquismo en las cascadas de los 27 Charcos de Damajagua hasta snorkel en Cayo Arena y una tarde relajante en la Marina de Ocean World.
Además de naturaleza, Puerto Plata tiene un montón de pueblos que brindan una cantidad de experiencias culturales. Centro del turismo comunitario, aquí podrás visitar plantaciones familiares de cacao o café, aprender a tocar y bailar merengue con una familia de músicos, o sumergirte en la pelota dominicana en el estadio y museo Bartolo Colón. A lo largo del camino, hallarás una gran variedad de experiencias culinarias, desde bocadillos al lado de la carretera hasta mariscos al lado de la playa, y restaurantes gourmet internacionales.
Los principales puntos de entrada a Puerto Plata incluyen el Aeropuerto Internacional Gregorio Luperón (POP), ubicado a 15 minutos del centro de la ciudad y de los hoteles de Playa Dorada o Costa Dorada, y el Centro de Cruceros Amber Cove en Maimón.